Museografía, Una guía completa sobre la realidad práctica del Museo: El estudio de los fondos
Análisis Humanístico y Técnico de las Obras
El arte, siendo un producto humano de gran valor, ha sido apreciado de manera diversa a lo largo de las distintas civilizaciones. Mientras que la cultura europea ha sentado las bases de la valoración artística actual, para culturas distantes de Europa este concepto puede no tener el mismo peso. Cada cultura posee su propio sistema de valoración artística, aunque no todas lo consideran prioritario.
En el contexto de la cultura europea, se enfatizan particularmente dos conceptos contemporáneos: la autenticidad y la originalidad.
En sus inicios, el arte poseía un valor religioso; las obras eran veneradas por su significado religioso. Durante el Renacimiento, el arte adquirió un nuevo valor: lo estético, donde una obra se volvía valiosa por su belleza intrínseca. Posteriormente, en el siglo XIX con la llegada de corrientes científicas, el arte comenzó a ser valorado por su relevancia histórica y documental.
En la era contemporánea, el arte es apreciado como un hecho cultural y también se le otorga un valor económico.
Estas valoraciones se han ido acumulando a lo largo del tiempo. En la actualidad, se valora en una obra todo aquello que ha sido apreciado anteriormente. Por tanto, una obra se encuentra en un museo debido a algunos de estos valores, junto con otros más específicos como la originalidad y la autenticidad. Estos dos valores fundamentales, a su vez, deben estar respaldados por la calidad: se asume que una obra de calidad posee autenticidad y originalidad, mientras que si carece de calidad, no se considera como arte.
El análisis de las colecciones de los museos es llevado a cabo por historiadores y conservadores, mientras que el rol de los restauradores se centra en aspectos técnicos de las obras de arte.
La Autenticidad
La autenticidad es un juicio crítico emitido sobre una obra para evaluar su grado de veracidad. Los métodos utilizados para determinar esta autenticidad involucran el estudio del autor, la cronología, el estilo, la iconografía, la localización y la técnica, todos ellos coordinados meticulosamente.
Estos datos, excepto la técnica (la cual proporciona información sobre la autoría y está en manos de los restauradores), son recolectados por los historiadores del arte.
Existen dos tipos de autenticidad:
- Autenticidad Artística: Es inherente al artista que creó la obra.
- Autenticidad Histórica: Representa una innovación creativa con calidad, a la vez que testimonia su período histórico. La falta de calidad en una obra de este tipo la clasificaría como pastiche.
Además de los métodos visuales de investigación, los métodos científicos son fundamentales para comprender la autenticidad. Se utiliza un sistema de trabajo basado en la valoración y comparación de datos. Sin embargo, ningún análisis proporciona datos definitivos, ya que se requiere la interpretación de un profesional en la materia. Es esencial el análisis químico y científico de los materiales, una tarea que requiere la colaboración de expertos en el campo.
Durante el estudio y análisis, es crucial la evaluación de los resultados por parte de profesionales, quienes compararán los hallazgos con obras ya documentadas.
La tarea de los museos es distinguir entre obras auténticas y copias. Sin embargo, una obra puede ser auténtica pero no original; es decir, puede tratarse de una copia auténtica en términos de cronología, pero ser una reproducción del maestro. Este discernimiento es una labor delicada pero esencial para la preservación y autenticidad del patrimonio artístico.
Los métodos científicos empleados se agrupan dentro de dos grupos, en cuanto a si son de carácter no invasivo o invasivo en la propia obra.
Métodos de Análisis no invasivos
Fotografía
La fotografía es una de las herramientas más comunes, sin embargo, sufre el inconveniente de resultar engañosa si no está bien realizada. A pesar de este desafío, su utilidad para documentar detalles es invaluable.
En la documentación visual, las cámaras manuales se consideran más efectivas que las digitales debido a que estas últimas tienden a deteriorarse con el paso del tiempo.
Radiografía
Las radiografías son herramientas comúnmente utilizadas en los talleres de los museos, especialmente en la pintura. Son valiosas porque permiten comprender el proceso creativo del artista, lo que nos ayuda a discernir si se trata de una obra original o una copia.
Por lo general, las radiografías de copias muestran una superficie uniforme y lisa, mientras que las de obras originales revelan un trabajo más detallado y elaborado. Además, nos proporcionan información sobre el soporte utilizado; en los lienzos, podemos identificar la trama de la tela, siendo una trama uniforme indicativo de tejido industrial, es decir, a partir de 1785. Una trama irregular sugiere una tela anterior a esa fecha.
En el caso de esculturas, las radiografías revelan detalles característicos de diferentes períodos, permitiéndonos identificar posibles intervenciones o cambios a lo largo del tiempo. Además, estas imágenes nos ayudan a detectar deterioros en los materiales utilizados en la creación de la obra.
Análisis infrarrojo
El análisis infrarrojo es un método no invasivo que consiste en capturar en fotografía la capa interna de las pinturas que componen una obra.
Hasta hace poco, no era factible realizar infrarrojos de cuadros de grandes dimensiones en una sola toma. Se solía emplear una especie de plantilla sobre la obra, tomando fotografías por secciones y luego uniendo los resultados como un rompecabezas.
Este método de análisis nos permite visualizar el dibujo subyacente de la obra, revelando aspectos cruciales para autentificarla. En el caso de pinturas flamencas, la ausencia de un dibujo subyacente o la falta del estarcido característico podrían indicar una falsificación.
Además, el análisis infrarrojo nos ayuda a apreciar la creatividad del maestro en relación con sus discípulos. Los dibujos subyacentes ofrecen información valiosa sobre las directrices establecidas por el maestro, quienes solían marcar los nombres de los colores en diferentes áreas para que los discípulos los pintaran siguiendo su estilo.
Las imágenes generadas por el análisis infrarrojo suelen mostrar tonos azulados y proporcionan indicios de posibles repintes o áreas con manchas oscuras, ofreciendo una visión más completa de la historia y los procesos de creación detrás de la obra de arte.
Luz ultravioleta
La luz ultravioleta es otro método no invasivo que se basa en la luz para revelar información valiosa en obras de arte.
Este método nos permite identificar los repintes tanto en pinturas como en esculturas, especialmente en términos de policromía. Además, nos ayuda a examinar las diversas capas de barniz y los retoques realizados por otros artistas en períodos posteriores. Su uso principal radica en la limpieza de pinturas y policromías.
Las obras expuestas a los rayos ultravioleta absorben radiación, lo que ha llevado a la rotación periódica de las obras en los museos para prevenir daños por esta exposición prolongada. Este método ha demostrado ser esencial para los conservadores y restauradores en la preservación y comprensión más profunda de las obras de arte.
Microfluorescencia de Rayos X (I)
La microfluorescencia de Rayos X es una técnica de análisis utilizada para examinar metales, aleaciones, materiales cerámicos, pigmentos, elementos de corrosión y diversas mezclas de compuestos en obras de arte.
Este método se puede llevar a cabo de dos maneras: mediante una pequeña toma de muestra o directamente sobre la obra utilizando un instrumento conocido como «lápiz de superficie». Este lápiz se desliza sobre la superficie de la pintura, y su lectura en la máquina revela los compuestos presentes en cada área, proporcionando información detallada sobre los pigmentos utilizados en la obra.
Es importante destacar que los pigmentos tienen fechas de origen específicas. Por ejemplo, el azul de Prusia se originó en el siglo XVIII. Por lo tanto, la presencia de azul de Prusia en una obra datada del siglo XVI indicaría una posible falsificación. Sin embargo, cabe mencionar que esta técnica, aunque muy precisa, puede no ser económicamente accesible para todas las investigaciones. A pesar de ello, se considera un método más preciso y detallado en comparación con la estratigrafía en la identificación de pigmentos y materiales en obras de arte.
Microfluorescencia de Rayos Láser
La técnica de microfluorescencia con Rayos Láser es especialmente útil en el análisis de materiales inorgánicos, destacando su aplicación en cerámica. Esta técnica tiene la capacidad de detectar de manera precisa y detallada componentes inorgánicos, siendo ampliamente utilizada en la evaluación de obras escultóricas.
Su principal función radica en revelar roturas y estructuras internas que son imperceptibles a simple vista. Además, permite profundizar en los procesos de elaboración de estos materiales, ofreciendo una visión detallada de su composición y características internas.
Holografía Láser
La Holografía Láser representa otro método valioso de análisis. Se utiliza para estudiar las variaciones dimensionales de una obra a lo largo del tiempo, así como para identificar tensiones presentes en diferentes partes de la misma, posiblemente atribuibles a la utilización de distintos materiales en su creación. Esta técnica es especialmente útil para detectar desprendimientos de películas pictóricas y cualquier otra alteración estructural en un objeto artístico.
El ológrafo, dispositivo utilizado en la holografía láser, genera una imagen tridimensional de la pieza analizada, permitiendo capturar con precisión milimétrica los desplazamientos de algunas de sus capas. Esta técnica es aplicable no solo a objetos pictóricos, sino también a esculturas, proporcionando información detallada sobre su estructura y posibles cambios a lo largo del tiempo.
Termoluminiscencia
La Termoluminiscencia es un proceso utilizado para datar materiales inorgánicos. Este método, con un margen de error aproximado del 10%, requiere muestras de gran tamaño. Se basa en la radiación luminosa emitida por los objetos cuando sus electrones son calentados. Cuanta mayor luminosidad se detecte, mayor antigüedad se estima en el material analizado.
Este método es frecuentemente empleado en la datación de piezas arqueológicas, cerámicas y metales, siendo una herramienta clave en la determinación de la cronología de estos objetos históricos.
Métodos de Análisis invasivos
En ellos hay que extraer una pequeña muestra del material.
Microfluorescencia de Rayos X (II)
La Microfluorescencia de Rayos X requiere la extracción de una pequeña muestra del material a analizar para su estudio. Se trata de un microscopio altamente sofisticado que se utiliza para llevar a cabo análisis cualitativos y cuantitativos de compuestos inorgánicos.
Este método es especialmente útil en el análisis detallado de metales, aleaciones, materiales cerámicos, pigmentos, elementos de corrosión y diversas mezclas de compuestos.
La técnica de análisis implica la toma de una pequeña muestra del material. Los pigmentos utilizados en obras de arte pueden revelar información sobre su origen temporal; por ejemplo, el azul de Prusia, que emergió en el siglo XVIII. Por tanto, la presencia de azul de Prusia en una obra fechada en el siglo XVI indicaría una posible falsificación.
Métodos de Análisis aplicados a la datación
Carbono 14
El método del Carbono 14 se puede aplicar a cualquier material orgánico, dado que todos los elementos, incluidos los seres humanos, contienen carbono en su composición. No obstante, el proceso es complejo y su margen de aproximación puede ser bastante amplio. El límite efectivo de este método se sitúa alrededor de los 50,000 años.
Una de las dificultades inherentes al Carbono 14 es que los resultados pueden variar si la pieza ha experimentado modificaciones a lo largo de su historia. El contacto con diferentes elementos o factores externos, como el fuego o el agua, puede alterar los niveles de carbono presentes en el material. Asimismo, para obtener resultados precisos, las muestras deben ser de un tamaño considerable.
Dendrocronología
La dendrocronología es un método de datación que se basa en el análisis de los anillos de crecimiento de la madera. Este método proporciona resultados bastante precisos cuando se analizan en comparación con otras especies de la misma región y época, siempre y cuando hayan experimentado condiciones ambientales similares.
El proceso implica la medición de los anillos de crecimiento de la madera, cuyo grosor varía debido a las diferentes condiciones climáticas a las que han estado expuestas. La anchura de estos anillos proporciona información sobre la edad de la madera, lo que permite determinar su antigüedad. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la edad de la madera no siempre coincide con la edad de la pintura, ya que en ocasiones la madera puede ser anterior a la aplicación de la pintura.
La Originalidad
La originalidad es un juicio de valor cualitativo que evalúa la creatividad de un artista, considerando su idea inicial como única y exclusiva en contraste con sus copias y reproducciones. Entre la originalidad y la reproducción, existen diversas formas de copias.
Para apreciar la originalidad, es crucial estudiar al autor. Este estudio nos lleva a comprender su formación, fuentes creativas, entorno vivencial y proceso formativo, permitiéndonos discernir si el autor está imitando o creando genuinamente.
En el proceso de originalidad, el artista se nutre de múltiples fuentes, filtrando luego esta información a través de su propia personalidad. Cuanto más amplio sea su bagaje cultural y experiencia, mayor será su originalidad. El conocimiento previo aporta ideas, sumado a su sensibilidad, conocimientos técnicos y procedimientos artísticos, culminando en una obra original y personal.
Estos factores son fundamentales para el análisis de las obras por parte de los museos. Sin embargo, los métodos científicos aplicados al arte no ofrecen un diagnóstico único y absoluto. Deben ser utilizados en conjunto y comparados con otros resultados para llegar a conclusiones. La comparación es la base metodológica que sustenta los juicios de valor de los expertos.
En la actualidad, los métodos científicos se han convertido en herramientas fundamentales para analizar la autenticidad y originalidad de las obras de arte, siendo esenciales y requeridos en cualquier museo. Sin embargo, el obstáculo radica en su alto costo y complejidad, lo que limita la capacidad de muchos museos para incorporarlos en sus departamentos de investigación.
A pesar de su utilidad, es importante reconocer que los métodos científicos no ofrecen una verdad absoluta. Su interpretación adecuada y la emisión de un juicio de valor son aspectos cruciales en su aplicación.
Sistemas de documentación en Museos
Una vez que se ha realizado el análisis de la obra, se procede a documentar utilizando diferentes instrumentos de descripción en los museos. Estos instrumentos incluyen el Inventario, el Catálogo y las Guías.
El Inventario es el primer documento que se crea al ingresar una obra en un museo. Se basa en sistemas de documentación estandarizados y su objetivo principal es realizar un recuento de las piezas. Aunque contiene datos básicos como autor, tema, cronología, ubicación, escuela, técnica y medidas, su enfoque es somero. Sin embargo, es fundamental para cualquier investigación museística debido a la información que proporciona sobre la historia material de la pieza.
El Catálogo constituye el segundo sistema de documentación, ampliando y completando la información del Inventario. Además de los datos mencionados en el Inventario, el Catálogo incorpora detalles adicionales como restauraciones, fotografías, bibliografía, entre otros aspectos relevantes recopilados sobre la pieza.
Existen dos tipos de catálogos en los museos: el monográfico y el sistemático. Ambos contienen datos similares, pero el Catálogo sistemático se organiza según los intereses específicos del museo (por época, estilo, etc.). Estos catálogos son esenciales para los trabajos de los museólogos, aunque no suelen estar disponibles para consulta si no han sido publicados.
Por otro lado, las Guías representan el tercer sistema de documentación y contienen los datos básicos del Catálogo junto con fotografías. Estas guías se utilizan para marcar itinerarios, indicando la ubicación de las obras dentro del museo, es decir, en qué salas se exponen. Si la disposición de las obras cambia, estas guías también se actualizan.
Además de estos sistemas, los Informes Técnicos son cruciales en la profesión museística. Se refieren a préstamos de obras, intervenciones de restauración y valoraciones de obras en caso de adquisición. Son especialmente relevantes cuando las obras son exhibidas en otros museos. Estos informes deben incluirse en los catálogos, ya que proporcionan información esencial para el análisis y estudio de las obras.
Escrito por Inmaculada Peña
Artista Plástica, Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla.