Retrato del Santísimo Cristo de las Almas

Realicé el retrato del Santísimo Cristo de las Almas para la exposición conmemorativa del 75 aniversario de su bendición, que la Hermandad de los Javieres había organizado para el mes de octubre en el Círculo Mercantil de Sevilla.

Una obra compleja en la que he trabajado durante siete meses, y que supone el retrato a pastel más grande que he realizado hasta ahora. Quería que tuviese unas dimensiones mayores a las que acostumbro a adaptarme porque la ocasión lo requería. Para mí, Sevilla es una plaza fuerte, dónde están los mejores artistas plásticos relacionados con temas cofrades.

La imagen de Cristo fue tallada en 1947 por el imaginero José Pires Azcárraga. Bajo mi punto de vista, la fuerza que tiene la talla de la cabeza es espectacular. Su caída en el hombro y el tratamiento de los cabellos es en lo que me centro para hacer el retrato fundamentalmente.

De hecho, creía que no iba a poder sacarle todo el potencial y volumen que tiene por la cantidad del brillos que desprende el barniz, pero al final conseguí sintetizar las luces y sombras, gracias al uso de tonalidades grises que transitan los contrastes entre ellas, devolviendo una sensación de polvo que lo suaviza todo y lo integra.